Ya está todo listo para el esperado Lima Hot Festival 2010, que tendrá como principal atractivo la presentación de los legendarios Smashing Pumkins y los Stereophonics, mega evento que se realizará el jueves 25 de noviembre en el estadio la universidad San Marcos.
Desde aquel 14 de noviembre del 2008 nadie esperaba una segunda versión de tamaño festival. Pero si bien la espera fue larga, valdrá la pena para apreciar a una de las voces más destacadas de los noventa; Billy Corgan, quien llega por primera vez a nuestro país, confirmando así la fecha separada para Lima en esta su gira Latinoaméricana.
No ha pasado mucho desde aquella noche. Fue un vienes 14 de noviembre del 2008. Definitivamente ese día marcó un antes y un después en lo que concierne a los conciertos en nuestro país. El Lima Hot Festival de aquel año será por mucho tiempo el punto de comparación con los siguientes megaconciertos que se vienen dando en nuestra querida Lima y de los que vendrán, sin ninguna duda.
Lo que nos dejó ese primer festival fue algo que simplemente nunca podremos olvidar, fans o no fans de R.E.M. o Travis, los más de 35 mil espectadores quedamos satisfechos por un espectáculo de primerísimo nivel.
Algunos pensaban que la cosa iba demasiado rápido. De no figurar en el calendario de ningún artista internacional importante pasamos a esto; una realidad más que envidiable para el resto de países de la región. Parece un sueño, como para atarnos las manos y no dejar de cantar.
Fueron 35 mil personas las que se reunieron esa inolvidable noche y presenciaron algo que nunca se imaginaron; un concierto con dos importantes bandas, cada una representante diferentes generaciones pero con un sello en particular, la buena música. Definitivamente fue un éxito total, la cantidad de espectadores así lo confirman.
Las calles aledañas al Estadio Nacional a eso de las 7 pm aún estaban congestionadas y el que menos aun seguía haciendo cola para ingresar a tan importante evento. Mientras el ingreso aún era fluido a las distintas zonas una de las bandas teloneras, Los Turbopótamos, ponía fin a su presentación. Los que conocíamos algo de su música nos pareció curioso no encontrar al baterista. Pero aun así la música siguió fluyendo y la gente calentaba motores para lo que se venia.
Al poco rato le llegó el turno a Cementerio Club. Arrancaron con Inmortales y le siguió un número de temas que se nos hacían poco conocidos. Entre canción y canción, trataban de empilar a la gente lo que a las finales consiguieron con su repertorio. La presentación de los inmortales dejó al público en toda la onda para recibir a los platos fuertes de la noche.
Desde la cancha del Estadio Nacional se veían las tribunas casi llenas y ya se venia sintiendo el calor suficiente como para recibir el nostálgico y suave brit pop de los escoceses de Travis. Así comenzó. Un excelente espectáculo, calidad, carisma desbordante por parte de uno de los integrantes del cuarteto, un show que nunca antes había visto.
Un Francis Hearly totalmente comprometido con la música, pegado al micrófono y cantando como si tuviese al amor de su vida delante de él. Era simplemente imposible no estar saltando y cantando con este grupo. Muchos allí conocíamos de memoria canciones como “Sing”, “Why does it always rain on me?” o “Side”. Su estilo juguetón pero siempre profesional y tocando extraordinariamente nos entregó un super concierto que fue bien correspondido por todo el público asistente. Nada mejor que escuchar “Why does it always rain on me?” mientras Francis interminablemente terminaba aquel concierto.
R.E.M. salía al escenario del Estadio Nacional, frente a 35 mil personas que simplemente no lo podían creer. Se prendieron las duras pantallas y arrancó el espectáculo con “Living well is the best revenge”, simplemente increíble. Nadie podía creer lo que estaba viendo a pocos metros los pioneros del rock alternativo, un grupo que veía en la televisión tan lejanos, Michael Stipe, Peter Buck y Mike Mills. Era un sueño.
Las pantallas transmitían las imágenes a una velocidad deslumbrante, las luces que iban de un rojo intenso a un blanco plateado que iluminaba todo el estadio. La gente no podía creer que estuviese escuchando éxitos como “ Imitation of life”, “The one i love”, “Bad day” y, una de las que más conmovió al público, “Everybody hurts”.
El concierto estuvo repleto de un feeling impresionante. No solo fue el espectáculo y la energía que le puso R.E.M., también fueron aquellos mensajitos que pasaban en la pantalla con frases como las de “quieren más R.E.M” o “R.E. M. Estar en un estadio casi lleno, con todo el furor, con una banda legendaria al frente nuestro fue una cosa de histeria colectiva, de un fanatismo como pocas veces visto en nuestro país. Era para no creerlo. Así fue, regresaron con “Supernatural superserious” y cinco temas más, entre ellos “Losing my religión” y para acabar la eterna, “Man on the moon”.
Es así que por fin después de dos largos años, Smashing Pumpkins llegará con su último disco; Teargarden By Kaleidyscope, un nuevo concepto discográfico que está siendo distribuido de forma gratuita por el myspace de la banda. Por su parte, Stereophonics llegará con sus más de 18 años de carrera y luego de presentarse en festivales como el Rock Werchter y Rock en Seine. Finalmente, para poner la cuota nacional estarán los clásicos de Mar de Copas, los ritmos electropicales de La Mente y la revelación de Space Bee. No falta mucho para la gran noche, para quienes aún no se enganchan con esta megabanda solo es necesario escuchar canciones como “Perfect”, “1979” o “Misery” entre otras de su larga trayectoria.
Autor: Arturo del Carpio
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